El nuevo Pontífice tuvo palabras para recordar a Francisco, su antecesor: "Permítanme hacer llegar esta misma bendición. Dios los quiere, Dios los ama a todos. Eñ mal no va a prevalecer. Estamos en las manos de Dios, por tanto, sin miedo, mano con mano, vamos adelante. Seamos discípulos de Cristo.